La Guerra del Agua

Extracto del Informador.com.mx de méxico
día 22-11-10

Análisis

Por Orestes E. Díaz Rodríguez
La guerra del agua

Los españoles que llegaron a la ribera del Cocibolca, hoy Lago Nicaragua, pensaron que se topaban con el mar. Rectificaron cuando sus caballos se acercaron a la orilla y comenzaron a abrevar. Sorprendidos, lo apodaron “Mar Dulce”.

Durante meses buscaron la zona de evacuación de sus excedentes hasta descubrir un brazo de agua que desprendiéndose del lago recorría 200 kilómetros de selva hasta unirse al océano. Fue bautizado como “El Desaguadero”. Dos cosas no se podían saber entonces, hombres como el almirante Nelson, el filibustero Walker, el pirata Drake y el empresario Vanderbilt atarían su destino a esas aguas, tampoco que el río llegaría a ser conocido como San Juan.

Cuatro cosas son imprescindibles conocer del San Juan: 1) Desplaza una masa considerable de aguas del lago y de ríos provenientes de Costa Rica. 2) Unido al Cocibolca crea vía acuática natural que prácticamente une al Atlántico con el Pacífico siendo acreedor de primer candidato a canal transoceánico. 3) Lluvias torrenciales cambiaron 150 años atrás su curso original cerca del delta, desviando el grueso de sus aguas hacia territorio de Costa Rica a través del Río Colorado. 4) Jamás Nicaragua aprovechó sus bondades. 5) Los costarricenses han utilizado sus aguas para dinamizar el sector turístico invirtiendo en canalización y dragado.

Hasta que llegó el comandante Edén Pastora y mandó a parar. Pastora lleva años imaginando el rescate de la vía pluvial. Consiguió el apoyo de Daniel Ortega y de un científico ruso construyendo una poderosa draga, también releyó varias veces los tratados que regulan la explotación del río. “Descubrió” que legítimamente puede recuperar para Nicaragua no sólo las aguas sino hasta la antigua salida al mar.

Los ingresos turísticos del Norte de Costa Rica palidecen con sus intenciones. ¿Cómo sobrevivirán si el tozudo “Comandante Cero” restablece el curso original del río?
La batalla se centrará en el carácter espurio de la reinterpretación del Comandante y sus asesores. Confían en que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya les imponga de su error.

La última vez que ambos países acudieron a esos servicios Nicaragua resultó vencedora. ¿Qué pasa si sucediera otra vez? El alboroto en la Organización de Estados Americanos (OEA) sería anecdótico y los nicas exclamarían con seguridad, ¡pura vida!